Ejercicios de relajación

Ejercicios de relajación

¿No te ha pasado nunca que con solo cantar unos minutos comienzas a sentir molestias en las cuerdas vocales o en otras partes de tu aparato fonador?
Bueno querido amigo, déjame comentarte que eso generalmente se debe a que tu cuerpo está muy tenso y debido a esa tensión tu aparato fonador no puede desenvolverse libremente. Te recomiendo que no intentes sobre exigirle a tu cuerpo y menos cuando se encuentra en estas circunstancias porque es igual que querer doblar un fideo que todavía no pasó por agua hirviendo.

Entonces ¿Cómo liberarse de esa tensión?
Bueno, puedes darte un baño caliente al igual que el bebe de la foto.

-NO NO Y NO!! ESTA SEMANA NO ME TOCA BAÑO!!

Ok!! No te asustes!! Todavía tengo una alternativa que puede salvar tu día!
!

-Uff!!! Ya empezaba a asustarme!!

Haz estos ejercicios con ropa confortable y en un ambiente tranquilo.


De pie

1) De pie, con las piernas ligeramente abiertas, los pies en linea con los hombros.

2) Distribuye el peso de forma igualitaria entre los dos pies.

3) Imagínate sujetando un balón inchable debajo de cada axila y siente como los espacios respiratorios se abren. Esto te hará expandir los hombros y abrir las axilas.

En consecuencia expandirás el volumen de tu torax para una respiración más profunda.

Sentado
1) Sentado en una silla, con la espalda apoyada en el respaldo y el cuerpo totalmente flojo.
2) Manteniendo la espalda derecha, dejar caer la cabeza suavemente para adelante (con el mentón apuntando hacia el pecho) dejándola así unos 30 seg. Repetir lo mismo dejándola caer suavemente para atrás (con la nariz apuntando hacia el techo), para la derecha y por fin para la izquierda (orejas apuntando a sus respectivos hombros).
3) Girar la cabeza suavemente en el sentido de las agujas del reloj haciéndola pasar por los puntos expuestos anteriormente durante unos 30 seg. y luego hacerla girar en dirección contraria también durante 30 seg.
4) Con la cabeza ya en el centro, girar suavemente el hombre izquierdo hacia atrás asegurándose de que recorra los bordes en su totalidad, luego hacerlo girar hacia adelante. Repetir los pasos con el hombro derecho. Finalmente repetir los pasos moviendo los dos hombros simultáneamente en las mismas direcciones.

Acostado
1) Acuéstate boca arriba, verifica que tu columna esté en contacto con el suelo.
2) Observa la oscilación natural de tu respiración expandiéndose y contrayéndose por medio del torax y abdomen. Permanece atento a los sonidos que emanan de este acto de respirar.
3) Simplemente observa las acciones de tu cuerpo. No las manipules, no las
controles. Sólo respira y sé consciente de tu respiración.
4) Tu cuello y cabeza deben estar estirados y libres.

5) Mantén esta posición por un minuto o algo más.

6) Disfruta de la extensión de tu columna dorsal, el espacio respiratorio extra y la
sensación de equilibrio adecuado en un estado de calma y atención.